Sobre la Feria del Libro de Madrid

Amigas, amigos:

Este año no nos hemos inscrito en la Feria del Libro de Madrid. Tomamos la decisión cuando supimos que, como en años anteriores, las editoriales que tienen su sede social fuera de Madrid (aunque sean miembros de una asociación federada en la Federación de Gremios de Editores de España) seguirían abonando una cuota de inscripción más alta.

Somos conscientes de que, tal como se afirma en el Reglamento de la FLM para el año 2023, “la titularidad y la responsabilidad de la Feria corresponden a la Asociación de Empresarias y Empresarios del Comercio del Libro de Madrid”, pero es innegable que la FLM es un gran acontecimiento y como tal atrae el interés de lectores y medios de comunicación, así como a muchos sellos de fuera de Madrid que hacemos el esfuerzo de asistir. Es el lugar por excelencia del encuentro con las y los lectores y una ocasión única de exponer nuestro fondo editorial a visitantes de todas partes.

No nos parece de recibo que los sellos que acuden a la FLM desde fuera de Madrid deban abonar una cuota distinta. Primero, porque el criterio de discriminar por procedencia nos parece cuanto menos peculiar y, en segundo lugar, porque a esa cuota de inscripción hay que sumarle los desplazamientos (a veces múltiples porque la FLM es larga) y el alojamiento. En el caso de una editorial independiente como la nuestra eso repercute muy directamente sobre cualquier resultado económico que se obtenga durante la FLM.

La FLM tiene una fuerza de atracción enorme, muy merecida. Han sido muchas las ediciones en que hemos tomado parte en ella. Este año echaremos muchísimo de menos las conversaciones con las y los lectores, con responsables y colaboradores de otros sellos y, en general, la atmósfera del Retiro. Pero así como nos entristece no estar también lamentamos no ver reconocido el granito de arena que las editoriales de fuera de Madrid aportamos al mantenimiento de la bibliodiversidad de la FLM, una bibliodiversidad que sin duda contribuye al atractivo de la feria y que, como se ha visto estos últimos días, puede verse en riesgo si no se la cuida. Ojalá que en un futuro cercano las condiciones de inscripción reflejen este factor.

Mientras tanto, amigas y amigos, ¡nos vemos en las librerías!

editorial minúscula
Barcelona, abril de 2023